Lando Norris aprovechó la estrategia y una dosis de fortuna para llevarse la victoria en una sprint caótica del Gran Premio de Miami, marcada por la lluvia, accidentes y un coche de seguridad que alteró el desarrollo de la carrera. El británico de McLaren cruzó la meta por delante de su compañero Oscar Piastri, quien ahora mantiene solo nueve puntos de ventaja en la clasificación del campeonato.
“Mi suerte en Miami parece bastante buena en este momento, realmente feliz”, declaró Norris, que también ganó el Gran Premio principal en este mismo circuito el año pasado.
La lluvia convirtió la jornada en un reto de supervivencia desde antes de la largada. Charles Leclerc se estrelló camino a la parrilla y no pudo tomar la salida. La visibilidad era tan reducida que el coche de seguridad lideró las vueltas iniciales antes de que se suspendiera el procedimiento de largada, reanudándose con una partida detenida en pista semi seca.
Max Verstappen, quien partía como favorito, fue sancionado con 10 segundos tras provocar una colisión en boxes con Kimi Antonelli al reincorporarse de manera insegura. El neerlandés cayó al fondo del clasificador, mientras que el joven italiano de Mercedes, que había hecho historia como el poleman más joven en F1 en cualquier formato, finalizó décimo.
Lewis Hamilton, con Ferrari, logró el tercer lugar tras cambiar oportunamente a neumáticos lisos. “Nunca pensé que llovería en Miami. ¡Menuda carrera nos ha dado!”, dijo el siete veces campeón, satisfecho con su desempeño tras un inicio de temporada complicado.
Carlos Sainz estrelló su Williams, y Fernando Alonso abandonó tras un contacto con Liam Lawson, lo que provocó la entrada del coche de seguridad que definió el cierre de la carrera.
Completaron los puntos Alex Albon (4º, bajo investigación), George Russell (5º), Lance Stroll (6º), Liam Lawson (7º) y el novato de Haas, Ollie Bearman (8º).