La Jornada 10 del Clausura 2025 nos trae un duelo cargado de tensión en el Estadio Olímpico Universitario, donde Pumas y Chivas se medirán con la urgencia de sumar puntos y recuperar el terreno perdido en la Liga MX. Ambos equipos llegan con altibajos en el torneo y con recientes cambios en sus estructuras deportivas, lo que añade un ingrediente extra a este enfrentamiento.
La escuadra universitaria no ha tenido un torneo sencillo. Su último partido fue un duro descalabro ante Xolos de Tijuana por 4-2. Esta derrota fue la gota que derramó el vaso para la directiva, que tomó la decisión de destituir al técnico Gustavo Lema tras una racha de tres encuentros sin victoria.
Con un registro de tres triunfos, dos empates y cuatro derrotas, los felinos suman 11 puntos y ocupan la posición 12 de la tabla general. Ante esta situación, la institución ya trabaja en la llegada de Efraín Juárez como nuevo entrenador, buscando darle un giro a su temporada.
El panorama no es mucho mejor para el Guadalajara. El equipo de Óscar García viene de una dolorosa derrota 3-1 ante Atlético San Luis, un resultado que evidenció las carencias del Rebaño y generó un fuerte descontento entre la afición. A esto se sumó la controversia generada por el festejo de Javier “Chicharito” Hernández, quien marcó el único gol de su equipo en la derrota.
Chivas se encuentra en la décima posición con 11 unidades, con un balance de tres victorias, dos empates y cuatro derrotas. Aunque todavía están en la pelea por un puesto en la fase final del torneo, el equipo ha mostrado muchas inconsistencias en su rendimiento.
Además, los rumores sobre la posible salida de Óscar García han tomado fuerza. Se dice que su futuro depende del resultado de este encuentro, y solo una victoria convincente podría darle algo de oxígeno. En caso contrario, la directiva rojiblanca podría tomar la decisión de prescindir de sus servicios y comenzar un nuevo proyecto de inmediato.
Con la presión sobre su técnico y la necesidad de sumar puntos, el Rebaño tendrá que mostrar una cara más competitiva si quiere evitar que su temporada se siga desmoronando. Ambos equipos llegan con la misma cantidad de puntos y fuera de la zona de clasificación. El que salga victorioso podría dar un gran salto en la tabla, mientras que el derrotado quedaría en una posición aún más comprometida.