Sam Kerr, estrella del futbol femenino y capitana de la selección australiana, fue declarada no culpable este martes en un juicio por presunto ultraje racista contra un agente de policía en Londres.
El veredicto se emitió tras siete días de audiencias en el tribunal de Kingston Crown y más de cuatro horas de deliberación por parte del jurado. Kerr, quien aceptó haber llamado al oficial Stephen Lovell “estúpido y blanco” durante un altercado en enero de 2023, negó que sus palabras tuvieran una connotación racista.
Según los reportes, el incidente ocurrió luego de una noche de fiesta en la que Kerr y su prometida, la futbolista estadounidense Kristie Mewis, fueron trasladadas a una comisaría por un problema con un taxista. Durante el juicio, la jugadora del Chelsea argumentó que su comentario fue una reacción a la sensación de vulnerabilidad que experimentó durante el trayecto en taxi y la posterior confrontación con la policía.
“Creía que él estaba usando su poder y privilegio sobre mí. Nunca entenderían por lo que pasamos y el miedo que sentimos”, declaró Kerr en su defensa.
El caso generó una gran controversia en Australia, donde su futuro como capitana de la selección ha sido cuestionado. James Johnson, presidente de la Federación Australiana de Fútbol, evitó pronunciarse sobre su regreso al equipo.
Kerr, máxima goleadora histórica de Australia con 69 tantos, continúa su recuperación tras una lesión de ligamento cruzado sufrida en enero. Se espera que regrese en abril para disputar amistosos contra Corea del Sur, de cara a la Copa de Asia 2026.