En lo que podría haber sido su último partido con Santos, Neymar pidió disculpas tras ser expulsado en la derrota 1-0 ante Botafogo, al intentar marcar con la mano en los minutos finales del encuentro correspondiente al Brasileirao.
El astro brasileño de 33 años, quien regresó al club que lo vio debutar profesionalmente, fue expulsado a los 76 minutos tras recibir su segunda amarilla por una mano intencional que anuló un gol. El equipo rival marcó el tanto del triunfo a los 86 minutos.
“La desesperación por marcar un gol a veces lleva a cometer errores”, escribió Neymar en Instagram. “Cometí un error, perdónenme. Si no me hubieran expulsado, estoy seguro de que habríamos conseguido los tres puntos”.
Neymar también criticó la primera amarilla que recibió antes del descanso: “La segunda tarjeta amarilla tiene que mostrarse, pero el árbitro tiene que estar bromeando con la primera. Es increíble cuántos árbitros malos hay por ahí. Esa es mi opinión, por favor no me sancionen aún más”, ironizó con un emoji.
El contrato de Neymar con Santos expira a finales de junio, y al quedar suspendido para la próxima jornada y sin una renovación confirmada, su retorno podría haber terminado abruptamente.
Santos suma apenas dos victorias en 11 partidos, ocupa el 18º lugar del campeonato brasileño y está en zona de descenso.