Mykhailo Mudryk, uno de los fichajes más caros de la historia del futbol, expresó este martes su “completo shock” tras ser notificado de que una muestra de dopaje que entregó a la Asociación Inglesa de Fútbol (FA) contenía una sustancia prohibida.
El delantero del Chelsea, quien fue adquirido en enero de 2023 por 108 millones de dólares del Shakhtar Donetsk, negó haber infringido conscientemente las normas antidopaje. A través de un mensaje en Instagram, Mudryk afirmó: “Puedo confirmar que me han informado que una muestra que proporcioné a la FA contenía una sustancia prohibida. Sé que no he hecho nada malo y sigo confiando en regresar a la cancha pronto”.
El Chelsea, por su parte, confirmó que la FA se puso en contacto con Mudryk luego de un “resultado adverso” en una prueba rutinaria de orina. A pesar de que el club no reveló detalles sobre una posible suspensión, aseguró que tanto Mudryk como el equipo están comprometidos con el programa antidopaje de la FA.
La FA, en tanto, no hizo declaraciones adicionales sobre el caso, y se limitó a resaltar que es responsabilidad personal de cada jugador garantizar que ninguna sustancia prohibida ingrese a su cuerpo, de acuerdo con sus regulaciones antidopaje.
Mudryk, quien se unió al Chelsea con la esperanza de convertirse en una de las estrellas del equipo bajo la gestión de los propietarios estadounidenses Todd Boehly y Clearlake Capital, ha tenido una adaptación complicada en la Premier League. A pesar de su elevado precio, el delantero ucraniano solo ha jugado en nueve partidos de liga esta temporada, y ha sido titular en una única ocasión.
El jugador, que también fue vinculado al Arsenal antes de su traspaso al Chelsea, firmó un contrato de ocho años y medio con el club londinense, un acuerdo poco común en el fútbol. Sin embargo, hasta ahora, ha sido incapaz de estar a la altura de las expectativas generadas por su fichaje.