Lamar Jackson, mariscal de campo de los Baltimore Ravens, podría volver a ser el jugador mejor pagado de la NFL, según indicó el lunes el entrenador en jefe John Harbaugh durante la reunión anual de primavera de la liga.
Jackson firmó en 2023 un contrato de cinco años por 260 millones de dólares, pero su cifra de tope salarial alcanzará los 74.65 millones en 2026 y 2027. Ante esto, los Ravens estarían evaluando una reestructuración para mantener la competitividad del equipo, tomando como referencia el acuerdo de Josh Allen con los Buffalo Bills.
“El valor es lo máximo”, comentó Harbaugh. “Cuando Lamar cobre, será el jugador mejor pagado del fútbol americano, igual que la última vez. Creo que con cada contrato que firme hasta que decida retirarse, será ese jugador”.
Jackson, de 28 años, ha sido dos veces MVP de la NFL y quedó segundo en la votación para el MVP de 2024, solo cuatro votos por detrás de Allen. Su actual contrato lo ubica noveno en la liga en valor agregado anual (AAV) con 52 millones de dólares, por debajo de mariscales como Joe Burrow, Jordan Love y Dak Prescott, cuyo contrato en Dallas promedia 60 millones anuales.
Además de Jackson, los Ravens tienen en la mira la renovación de otros jugadores clave como el safety Kyle Hamilton y los alas cerradas Isaiah Likely y Mark Andrews. “Sé que se ha hablado de eso internamente. Desconozco cuánto ha avanzado o qué tan lejos está”, explicó Harbaugh sobre las negociaciones. “Habrá que seguir abordándolo. Lamar es la pieza clave porque es el jugador franquicia. Tarde o temprano, sin duda, tendrá que suceder”.