Giannis Antetokounmpo volvió a hacer historia en la NBA al convertirse en el primer jugador en registrar una línea estadística de 35 puntos, 17 rebotes y 20 asistencias en un solo partido. Su actuación brillante fue clave en la victoria 126-113 de los Milwaukee Bucks sobre los Philadelphia 76ers la noche del jueves.
Además de su descomunal rendimiento, Giannis impuso una marca personal en asistencias, liderando a unos Bucks que mostraron gran eficacia ofensiva: encestaron el 51.6% de sus tiros desde la línea de tres puntos. Esta actuación llega dos días después de que Milwaukee tuviera una noche casi perfecta frente a los Phoenix Suns, con un 68.9% de efectividad en tiros de campo, la más alta registrada en la liga desde 1998.
Brook Lopez aportó 17 puntos, Kyle Kuzma sumó 16 y AJ Green conectó cuatro triples para cerrar con 12 unidades. El entrenador Doc Rivers tuvo que dejar el banquillo en la primera mitad debido a una enfermedad, lo que obligó al asistente Darvin Ham a asumir la dirección del equipo desde la banda.
Por parte de los 76ers, el novato Adem Bona brilló con 28 puntos, su máxima cifra personal, al acertar 13 de sus 15 tiros. Quentin Grimes aportó un doble-doble de 24 unidades y 10 asistencias, mientras que Guerschon Yabusele sumó 22 puntos.
Los Bucks jugaron su octavo partido consecutivo sin Damian Lillard, quien se encuentra en recuperación tras ser diagnosticado con trombosis venosa profunda en la pantorrilla. Doc Rivers, sin embargo, ofreció un parte alentador al señalar que el tratamiento está dando resultados positivos y que el equipo tiene “mucha más esperanza hoy que hace tres días” respecto a su regreso.