En un movimiento que marca el inicio de una nueva era, Everton anunció este jueves el despido de Sean Dyche como entrenador, apenas unas semanas después de que el grupo Friedkin adquiriera el histórico club inglés.
El cese de Dyche, que estuvo al frente del equipo durante casi dos años, se da en un contexto complicado: el equipo ocupa el puesto 17 en la Premier League, solo un punto por encima de la zona de descenso. Su estilo defensivo no logró resultados consistentes, con apenas una victoria en los últimos 11 partidos de liga y solo 15 goles anotados en 19 jornadas, la segunda cifra más baja del torneo.
La decisión se hizo pública horas antes de que Everton enfrentara al Peterborough, equipo de tercera división, en la tercera ronda de la Copa FA. Leighton Baines, exjugador y entrenador del equipo Sub18, junto con el capitán Seamus Coleman, tomarán el cargo de manera interina mientras el club busca un nuevo entrenador.
El grupo Friedkin, encabezado por Dan y Ryan Friedkin, adquirió al Everton el mes pasado por una cifra que ronda los 495 millones de dólares. Aunque son propietarios de la Roma en la Serie A italiana, donde han tomado decisiones polémicas, los nuevos dueños parecen determinados a cambiar la trayectoria del Everton, que no gana un título importante desde 1995.
El próximo reto para el equipo será enfrentar al Aston Villa en la Premier League el miércoles, un partido crucial en la lucha por evitar el descenso.