Un tenso intercambio entre el comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, y la estrella de los Philadelphia Phillies, Bryce Harper, marcó una reciente reunión privada entre el alto ejecutivo y el equipo, según reveló una fuente con conocimiento directo de la conversación a la agencia AP.
El encuentro, que duró más de una hora y se llevó a cabo la semana pasada en Filadelfia, tenía como objetivo abordar temas como el panorama mediático y estrategias para hacer crecer el béisbol. Sin embargo, las cosas se salieron de control cuando Manfred aparentemente tocó el espinoso tema del tope salarial, un punto históricamente rechazado por el sindicato de jugadores.
“Si estás aquí para hablar sobre un tope salarial, ya puedes largarte (improperio) del vestidor”, habría dicho Harper, según la fuente que pidió anonimato por tratarse de una situación delicada. La declaración directa y sin filtros del dos veces MVP dejó claro el rechazo que existe entre los jugadores hacia la posible imposición de un tope en las nóminas de los equipos.
Su compañero Nick Castellanos confirmó aspectos de la reunión en entrevistas recientes con The Bandwagon y ESPN, respaldando la autenticidad del tenso momento.
El contrato colectivo actual expira en diciembre de 2026 y, aunque aún faltan dos temporadas, ya comienzan a surgir preocupaciones entre los peloteros por una eventual ofensiva de la liga para establecer límites salariales, algo que la MLB nunca ha implementado, a diferencia de ligas como la NFL o la NBA.
El trasfondo del debate incluye una caída en los ingresos por derechos de transmisión en redes regionales, así como las crecientes diferencias en el gasto entre franquicias. Pero para figuras como Harper, la libertad financiera de los jugadores no está en negociación.