La temporada regular ha terminado, pero para cuatro equipos, el sueño de los playoffs sigue vivo. El torneo de play-in de la NBA concluye este viernes con dos partidos de eliminación directa: Miami Heat visita a Atlanta Hawks en la Conferencia Este, mientras que Dallas Mavericks, liderados por Klay Thompson, enfrentan a Memphis Grizzlies en el Oeste.
El ganador de cada encuentro avanzará a la postemporada como octavo sembrado y enfrentará a los líderes de su conferencia, Cleveland Cavaliers en el Este y Oklahoma City Thunder en el Oeste, el próximo domingo. Los perdedores, en cambio, quedarán eliminados.
Para Klay Thompson, quien disputa su primera temporada con Dallas tras una carrera legendaria en Golden State, estos partidos son igual de importantes que unas Finales. “No son las Finales de la NBA ni las de conferencia, pero seguimos vivos, y muchos equipos no”, afirmó el escolta, que ya cuenta con cuatro anillos y ha disputado 33 finales.
Dallas llega con impulso tras vencer a Sacramento y eliminar a los Kings. Miami hizo lo propio al dejar fuera a Chicago. Ambos equipos, sembrados décimos, podrían hacer historia: nunca antes un equipo en ese puesto ha clasificado a playoffs ganando dos partidos como visitante.
Del otro lado, Hawks y Grizzlies desperdiciaron sus primeras oportunidades el martes. Atlanta cayó ante Orlando y Memphis ante Golden State. Ahora, solo les queda una bala para mantener viva su temporada.
“Es como la Locura de Marzo: ganas o te vas a casa”, dijo Bam Adebayo, pívot del Heat. Mientras que el base de los Hawks, Trae Young, se aferra a la esperanza: “Tenemos otra oportunidad. Eso es prácticamente todo”.
Los ganadores del viernes tendrán apenas un día para recuperarse antes de medirse con el primer sembrado de su conferencia. Pero nadie en estos equipos se queja: el sueño de playoffs aún arde con fuerza.