El futuro del Juego de Estrellas de la NBA es incierto, ya que la liga busca una nueva fórmula para revitalizar el evento tras la baja audiencia registrada este año. El comisionado Adam Silver reconoció que el minitorneo de tres juegos implementado en San Francisco no cumplió con las expectativas y que la liga está “volviendo a la mesa de dibujo” para definir el formato de 2025.
El Juego de Estrellas de este año tuvo una audiencia de 4.7 millones de espectadores en TNT, un 13 % menos que en 2023, cuando alcanzó 4.6 millones, el peor registro histórico. “Pensé que habíamos logrado un poco de progreso, pero fue un fracaso. No estamos a la altura de crear una experiencia All-Star de la que podamos estar orgullosos”, admitió Silver.
El formato implementado en 2024 incluyó cuatro equipos, tres conformados por los 24 All-Stars y uno más integrado por los ganadores del evento Rising Stars. Sin embargo, la ausencia de estrellas como LeBron James y Anthony Edwards, además de la estructura del evento, provocaron críticas.
Silver reconoció que la intención de este año fue apostar por un espectáculo más centrado en el entretenimiento, pero los largos descansos y la falta de emoción afectaron el producto final. Con el cambio de televisora para 2025, cuando NBC reemplazará a TNT después de 23 años, la NBA buscará un formato más atractivo, aunque descarta de momento una propuesta similar al modelo “Estados Unidos vs. Mundo” de la NHL.
El Juego de Estrellas de 2025 se llevará a cabo en Inglewood, California, coincidiendo con la cobertura de NBC de los Juegos Olímpicos de Invierno en Milano Cortina. La liga trabaja en definir un nuevo esquema para recuperar el interés de los aficionados y jugadores en este evento.