Saquon Barkley ha cambiado el destino de los Eagles de Philadelphia en su primera temporada con el equipo. Con 2,005 yardas en la campaña regular y un dominio absoluto en los playoffs, el corredor ha sido la pieza clave para que los Eagles regresen al Super Bowl con la esperanza de revancha contra los Chiefs de Kansas City.
El impacto de Barkley ha sido inmediato. Además de romper el récord de la franquicia en yardas terrestres en una temporada, se ha convertido en apenas el noveno jugador en la historia de la NFL en superar las 2,000 yardas por tierra. Su explosividad es un arma letal: ha logrado siete acarreos de touchdown de más de 60 yardas y es uno de los dos únicos jugadores en la historia con al menos 400 yardas terrestres y cinco anotaciones en una sola postemporada.
A solo 30 yardas de romper el récord de Terrell Davis de más yardas en una temporada (incluyendo playoffs), Barkley tiene la oportunidad de hacer historia el domingo en el Super Bowl, justo el día en que cumple 28 años.
Philadelphia no solo ha encontrado en Barkley a su estrella ofensiva, sino que ha reforzado su defensa con nombres clave como el tackle Jalen Carter, quien ha brillado con cinco capturas, 53 presiones al quarterback y dos balones sueltos forzados. Además, el coordinador defensivo Vic Fangio ha transformado una defensiva que el año pasado estaba entre las peores de la liga en una de las más eficientes.
Los Eagles lideraron la NFL en defensa total con solo 278.4 yardas permitidas por partido y establecieron el récord histórico de la liga en yardas por tierra en una temporada (3,731 entre fase regular y playoffs).
Enfrente estarán los bicampeones Kansas City Chiefs, un equipo que sabe elevar su nivel en los momentos clave. Con nueve victorias consecutivas en playoffs y un Mahomes intratable en postemporada, los Chiefs buscan convertirse en el primer equipo en más de dos décadas en lograr un tricampeonato de Super Bowl.
Mahomes contará con una ofensiva reforzada, con Travis Kelce como su arma confiable y la adición de receptores como DeAndre Hopkins y Marquise Brown. Además, los Chiefs han sido una de las mejores defensas contra la carrera esta temporada, un desafío directo para Barkley y la línea ofensiva de Philadelphia.
El Super Bowl promete ser un duelo de poder entre la mejor ofensiva terrestre de la liga y un equipo de Kansas City que parece invencible en postemporada. ¿Podrá Barkley hacer historia y darle a los Eagles su segundo anillo de campeón?