Todo listo para el Cotton Bowl y un lugar en la final nacional

El Cotton Bowl será el escenario del enfrentamiento entre Texas Longhorns y Ohio State Buckeyes, con un boleto al campeonato nacional en juego en el primer año del College Football Playoff (CFP) ampliado a 12 equipos. Este duelo reúne a dos de los programas más destacados del futbol americano universitario.

Los Longhorns, quienes no han disputado un campeonato nacional desde 2009, buscan coronar su última temporada en la Big 12 antes de unirse a la Southeastern Conference. Su defensiva, liderada por el cornerback Jahdae Barron, es una de las más asfixiantes del país. Barron, galardonado con el premio Thorpe al mejor back defensivo, será clave para detener a Jeremiah Smith, receptor estelar de los Buckeyes que suma 1,224 yardas y 14 touchdowns en la temporada.

Por su parte, Ohio State llega con el aval de ser la mejor defensa del país y un ataque terrestre encabezado por TreVeyon Henderson y Quinshon Judkins, quienes acumulan 20 touchdowns combinados. Los Buckeyes buscan redimirse tras perder el Cotton Bowl el año pasado contra Missouri.

El mariscal de campo de Texas, Quinn Ewers, intentará extender su racha de 26 juegos consecutivos lanzando al menos un touchdown. Sin embargo, enfrentará a una defensa de Ohio State que ha permitido la menor cantidad de touchdowns en toda la temporada.

Este enfrentamiento no solo definirá al finalista del campeonato, sino que también pondrá a prueba a figuras emergentes como Colin Simmons, el novato sensación de Texas, y a linieros de élite como Kelvin Banks Jr., ganador del Trofeo Outland.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio